
Cómo afecta el mal tiempo al desarrollo de los trabajos verticales
Con la llegada del fin del año es inevitable realizar un balance sobre todo lo que ha ocurrido en los doce últimos meses. Y lo cierto es que para nosotros este balance no puede ser más positivo, algo que tenemos que agradecer especialmente a todas las personas que han confiado en Trabajos Verticales y han contratados nuestros servicios o alquilado nuestra maquinaria elevadora.
Pero también es el momento de mostrar agradecimiento hacia nuestro propio equipo que, días tras día, ha demostrado estar al pie del cañón, enfrentándose a un trabajo que es realmente duro y peligroso. Porque los trabajos de altura que realizamos, en ocasiones, se desarrollan en condiciones realmente adversas que afecta de manera directa a su desarrollo y requieren un extra de pericia y experiencia, además de seguridad.
Para terminar el año y poner en valor el trabajo de nuestro equipo, hoy nos gustaría hablarte precisamente de esas condiciones climatológicas adversas que hacen que la realización de los trabajos verticales en Mallorca se vuelva mucho más peligrosa.
¿Cuáles son los agentes climáticos más peligrosos en los trabajos verticales?
La respuesta es clara: el viento es el agente climatológico más peligroso para la buena marcha de un trabajo vertical y la lluvia el que más suele complicar su desarrollo.
En general, tanto las condiciones climáticas adversas como las condiciones extremas afectan de manera directa a cómo los trabajadores verticales desarrollan su labor. Porque tan peligrosas pueden ser las rachas de viento de 40 km/h como una ola de calor en la que el termómetro pasa de los 38 ºC.
Se dan ocasiones en las que, ante una climatología muy adversa, lo mejorar es paralizar los trabajos, especialmente si la presencia de factores como el viento o la lluvia dificulta la visibilidad o la estabilidad. Además, estos agentes también aumentan los peligros de deslizamiento y hacen crecer el riesgo de accidente al entrar en contacto con equipos eléctricos.
La importancia de la protección en los trabajos verticales
Si el desarrollo de estos trabajos requiere unas medidas de seguridad muy concretas y especializadas, cuando la climatología se complica es fundamental incrementar esas medidas y extremar las precauciones.
Es totalmente imprescindible contar con equipamiento, herramientas, EPIs y vestuario especialmente adaptado a las condiciones meteorológicas. Estos equipos protegen a los trabajadores de la acción de los agentes climáticos pero también minimizan los posibles riesgos si se produce un caída, un golpe o un resbalón.
Una recomendación básica en estos casos
El Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el trabajo (INSHT), recomienda no efectuar trabajos de descuelgue vertical si el viento supera los 50 kilómetros por hora.
Aunque se trata de una recomendación y no de una imposición legislativa, lo más sensato es que, ante rachas de esta velocidad, los trabajadores que están realizando labores a la intemperie, tanto en plataformas de elevación como mediante descuelgues, los pospongan. Debe primar siempre la seguridad de los trabajadores sobre cualquier coste añadido que conlleve la paralización de un trabajo.
De ahí la importancia siempre de planificar los proyectos en función de las predicciones meteorológicas oficiales. Todos sabemos que se trata de predicciones que pueden no ser exactas pero, al fin y al cabo, permitirán organizar el trabajo y adelantarse a las situaciones más adversas, como por ejemplo, los vientos huracanados.
En Trabajos Verticales estamos muy orgullosos de la labor que realiza nuestro equipo y desde aquí queríamos reconocerles su gran experiencia, valía y buen hacer, ya que todos los proyectos realizados este 2020 no hubieran podido llevarse a cabo sin su experiencia y compromiso.
¡Desde Trabajos Verticales os deseamos unas Felices Fiestas y un próspero 2022!